El Resguardo Colonial Cañamomo Lomaprieta y AGROSAVIA clausuran el Sistema Territorial de Innovación, iniciativa comunitaria que fortalece la soberanía alimentaria y la innovación agropecuaria

• El STI Caldas impulsó acciones orientadas a mejorar la productividad agropecuaria, la promoción de la sostenibilidad ambiental y el fortalecimiento del bienestar comunitario, articulando saberes ancestrales, acompañamiento técnico y prácticas innovadoras.

• Comuneros y comuneras compartieron sus aprendizajes y experiencias, evidenciando mejoras en la producción, cuidado del suelo, manejo de cultivos y adopción de prácticas agroecológicas.

• Durante esta jornada que contó con el acompañamiento de las entidades territoriales y el cabildo del Resguardo, se realizó el lanzamiento de cuatro publicaciones que compilan recomendaciones prácticas, pedagógicas y culturalmente significativas, que quedarán al servicio de las comunidades.

• El evento de cierre se convirtió en el escenario ideal para compartir con los asistentes dos exposiciones: una muestra fotográfica y una exhibición de obras artísticas elaboradas por los niños del Resguardo.

 

Manizales, Caldas. Diciembre 3 de 2025. La Corporación colombiana de investigación agropecuaria (AGROSAVIA) y el Resguardo Colonial Cañamomo Lomaprieta realizaron el evento de cierre del Sistema Territorial de Innovación (STI), iniciativa que fortaleció las capacidades productivas, técnicas y organizativas de las familias del territorio, integrando conocimientos tradicionales, ciencia y procesos de innovación hacia un modelo agroecológico con identidad propia.

Durante el último año, el STI Caldas impulsó acciones orientadas a mejorar la productividad agropecuaria, la promoción de la sostenibilidad ambiental y el fortalecimiento del bienestar comunitario.  Este proceso articuló saberes ancestrales, acompañamiento técnico y prácticas innovadoras, haciendo del Resguardo y sus comunidades, un referente de construcción territorial participativa.

Los Sistemas Territoriales de Innovación (STI) en Colombia se encuentran jurídicamente respaldados en la Ley 1876 de 2017 y se reconocen como espacios de articulación entre actores públicos, privados y comunitarios para potenciar la innovación en territorios. En esta oportunidad, las actividades del STI Caldas se dinamizaron con las comunidades asentadas en los municipios de Riosucio y Supía desde las capacidades corporativas de la Sede Eje Cafetero y los Centros de Investigación La Selva y El Nus.

El evento inició con una armonización espiritual como acto de agradecimiento y honra a las fuerzas que sostienen la vida en el territorio. A continuación, se socializaron los principales logros alcanzados en las líneas priorizadas: plátano, caña de azúcar para panela, especies menores y huertos medicinales y de pancoger, resaltando las mejoras en la producción, la adopción de prácticas sostenibles y el fortalecimiento de sistemas agroecológicos ajustados al contexto del Resguardo.

Uno de los momentos centrales del acto fue la presentación de aprendizajes por parte de las familias participantes. Con claridad y sentido comunitario, comuneros compartieron sus conocimientos y experiencias, evidenciando mejoras en la producción, cuidado del suelo, manejo de cultivos y adopción de prácticas agroecológicas.

Este ejercicio de socialización estuvo acompañado por los profesionales de AGROSAVIA y personal del Programa de Soberanía Alimentaria del Resguardo, quienes complementaron las intervenciones con explicaciones técnicas y valoraciones colectivas, demostrando la unión entre el conocimiento científico, el saber tradicional y la experiencia directa de los comuneros en sus parcelas.

La jornada contó con el acompañamiento de la Secretaría de Agricultura de la Gobernación de Caldas y los equipos agropecuarios de las alcaldías de Riosucio y Supía. Estas entidades destacaron la relevancia del STI para dinamizar la producción, fortalecer las capacidades locales y aportar al desarrollo rural del territorio indígena.

Uno de los momentos más significativos fue el lanzamiento de varias publicaciones construidas de manera colectiva entre comuneros, técnicos del Resguardo y profesionales de AGROSAVIA:

• Guías de producción de especies menores, orientadas al fortalecimiento de la economía familiar.
• Guía de producción de huertos medicinales y de pancoger, que rescata la sabiduría ancestral y promueve la salud comunitaria.
• Manual para el manejo de enfermedades de la caña panelera, desarrollado con participación directa de productores.
• Planeador ilustrado, que integró fotografías del proceso, arte indígena infantil y principios organizativos del Resguardo.

Estas publicaciones compilan recomendaciones prácticas, pedagógicas y culturalmente significativas, que quedarán al servicio de las comunidades, fortaleciendo así los procesos del territorio.

 

Con arte, las nuevas generaciones expresaron su sentir

El evento de cierre se convirtió en el escenario ideal para compartir con los asistentes dos exposiciones: una muestra fotográfica que retrata las diferentes fases del proceso y una exhibición de obras artísticas elaboradas por los niños del Resguardo, creadas días antes durante un taller de pintura.

Esta actividad no solo dejó ver la percepción y el sentir de las nuevas generaciones, sino también la manera de cómo integran en su mirada los principios ancestrales que han guiado a su pueblo por siglos.

A través de sus dibujos y colores, reconocieron el valor profundo de todo lo que los rodea: la naturaleza como un ser vivo y sagrado; la familia como primer espacio de aprendizaje y protección espiritual; los cultivos y la tierra como madre que sostiene y alimenta; y los animales como hermanos menores con quienes comparten el territorio.

Cada trazo reflejó la importancia del equilibrio, la reciprocidad y el respeto por la vida, valores que hacen parte de su cosmovisión y que siguen transmitiéndose de generación en generación.

Para el Resguardo Cañamomo Lomaprieta, el cierre del STI no representa un final, sino el inicio de una nueva etapa de innovación comunitaria, fortalecimiento del territorio y soberanía alimentaria. Este proceso reafirma que cuando se unen la tradición, la investigación y la voluntad colectiva, es posible generar transformaciones reales y duraderas para el buen vivir.