La gobernanza y la seguridad alimentaria en la Cuenca del Río Atrato se fortalece con alianza entre el Ministerio de Agricultura, AGROSAVIA y el PNUD

• La iniciativa busca implementar cuatro modelos productivos centrados en la producción de semillas de calidad para cultivos como arroz, maíz, plátano y hortalizas, con el fin de mejorar la seguridad alimentaria y promover la autosuficiencia de las comunidades locales.
• El proyecto impactará comunidades de los municipios de Carmen de Atrato, Riosucio, Vigía del Fuerte y Lloró en el departamento de Chocó.
• Este esfuerzo interinstitucional se enmarca en Sentencia T-622 de 2016, que reconoció al Río Atrato como sujeto de derechos, subrayando la necesidad urgente de proteger este ecosistema único y sus comunidades.

 

Quibdó, Chocó. Septiembre 30 de 2024. En una alianza estratégica, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, la Corporación colombiana de investigación agropecuaria - AGROSAVIA y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD en Colombia) han puesto en marcha el proyecto -desarrollo de protocolos de modelos productivos agrícolas propios de la cuenca del Río Atrato-, el cual es derivado de los servicios de apoyo al proyecto -acompañamiento al Estado para el fortalecimiento de los fundamentos de gobernanza en el cumplimiento de los derechos humanos fundamentales de poblaciones vulnerables-, liderado por el PNUD.

Esta iniciativa busca aunar esfuerzos para el rescate de las formas tradicionales de producción a partir de un diagnóstico de las condiciones actuales de la obtención de semilla; desarrollo de protocolos para la conservación, producción y multiplicación de semilla de calidad,  en el que  converjan el conocimiento tradicional de las comunidades atrateñas y el conocimiento científico, para garantizar así la seguridad alimentaria del territorio; posibles desarrollos de modelos de agronegocios y diversificación de economías regionales.

Para lograr este propósito, se implementarán diversas estrategias que incluyen la creación de parcelas comunitarias en los municipios de Lloró, Vigía del Fuerte, Riosucio, y Carmen de Atrato, donde se establecerán núcleos de producción para cada cultivo priorizado. Estas parcelas servirán como centros de aprendizaje donde las comunidades podrán integrar sus conocimientos ancestrales con técnicas científicas.

Asimismo, se realizarán jornadas de diálogo y capacitación que permitirán a los habitantes locales discutir y adoptar alternativas tecnológicas para mejorar la eficiencia y sostenibilidad de sus sistemas productivos. De igual manera, se les hará entrega de kits de fortalecimiento que incluirán herramientas y recursos para apoyar la conservación y reproducción de semillas, asegurando la continuidad y calidad de las prácticas agrícolas locales.

Wiston Maquilon Mena, líder y representante del consejo comunitario de las negritudes de la cuenca del río Salaquí en el municipio de Riosucio, Choco, señala que “esta unión estratégica con AGROSAVIA, nos va a permitir mejorar nuestro sistema productivo de plátano, aquí en Salaquí, porque el conocimiento técnico junto a los saberes ancestrales de nuestra comunidad, es algo así, como una combinación bomba, que nos va permitir salir adelante con las semillas mejoradas de plátano, para poder comercializar a nivel local, regional y porque no, a nivel nacional. Permitiéndonos mejorar el nivel de vida de nuestra gente”.

El desarrollo del proyecto se dará en conjunto con los guardianes del rio Atrato, quienes tendrán el rol de sabedores locales y sus actividades estarán enmarcadas en ser el hilo conductor entre las comunidades y las entidades participantes, facilitando la implementación de acciones de esta iniciativa en los territorios

Aida Luz Mosquera Murillo, representante de la dirección de capacidades productivas y generación de ingresos del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, señala que “esta alianza interinstitucional ha sido clave para el cumplimiento de la sentencia T-622 de 2016 y para poner en marcha este proyecto importante para estas comunidades, en el que ellas serán las protagonistas y en el que se combina lo ancestral con lo científico”.

Para el desarrollo de esta propuesta AGROSAVIA, da especial importancia al respeto del conocimiento tradicional de las comunidades, la incorporación de técnicas acordes con los principios y valores de estas poblaciones, la articulación con sus planes de vida, entre otros múltiples factores de alineación, como estrategias clave para el desarrollo de trabajos conjuntos entre la institucionalidad y los territorios.

Gustavo Adolfo Rodríguez Yzquierdo, investigador Ph.D. Senior y líder del proyecto, destacó la importancia de este esfuerzo conjunto: "Este proyecto es una oportunidad única para combinar el conocimiento ancestral de las comunidades atrateñas con el conocimiento científico, con el fin de garantizar la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible en la región, a través del desarrollo de un modelo de producción y multiplicación de semilla de calidad, con el que se garantizan los aspectos genético, físico, fisiológico y sanitario del material vegetal”.